Teruel capital y entorno

El mudéjar es una forma artística única, un verdadero ejemplo de convivencia entre culturas. Y el de Teruel, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, representa el mejor conjunto mudéjar del mundo. Paseando por su casco urbano, si alzas la vista, contemplarás las torres de San Martín, El Salvador y San Pedro, tan hermosas como la torre de la catedral de Santa María. Entrar para admirar su impresionante techumbre de madera -considerada por muchos la ‘Capilla Sixtina’ del mudéjar– justifica por sí sola la visita.

Pero no todo es medieval en Teruel. El Acueducto de los Arcos está considerado como una de las obras de ingeniería más relevantes del Renacimiento español. También podrás disfrutar del Modernismo en diversos edificios de la emblemática plaza del Torico, que sirve de escenario de las fiestas más populares que se celebran en la ciudad, las de la Vaquilla, durante el mes de julio.

Muy cerca reposan los restos de los Amantes de Teruel. Visita su Mausoleo y, si tienes ocasión, acude en febrero para vivir el fervor de una fiesta que recrea la trágica historia de amor de Isabel de Segura y Diego de Marcilla: las Bodas de Isabel.

Para divertirte en familia, qué mejor opción que Dinópolis. Un parque temático en torno a los seres más extraordinarios que han habitado el planeta que hace las delicias de grandes y pequeños.

Y hablando de dinosaurios…  ¿Sabes dónde se encontró el primer dinosaurio en España? Fue en Galve, a pocos kilómetros de la capital turolense. De ahí que Galve sea una de las subsedes de Territorio Dinópolis (Legendpark). Aquí podrás ver los restos del Aragosaurus (primer dinosaurio español). Completa tu visita acercándote al Museo Paleontológico, donde se expone una magnífica colección de fósiles.